"Pero no hay primavera en Anhedonia...."
En efecto,
ni una puta flor
crece
en este cementerio
de promesas avejentadas.
Tal vez,
defecto de riego,
las lágrimas no sirven
para fertilizar el sesgado
trecho con tanta pulcritud amanerada.
Grita,
maldito seas y ¡Grita!
que se te rompa el alma
hecha pedazos
cultivame nuevas flores
tengo el pecho hecho de tierra
y los ojos con la sangre
fuera de mis venas
arrancame el último vestido
regalado
en otra de esa feria de vanidades
en otra de esas calesitas infernales
donde perdí el atuendo de virgen
otra vez.
otra voz.
otro hecatombre de Lucifernia
desesperada por acabar
en ese perverso deseo
de prosperar
en el incienso de su boca.
Roja
bella
suya.
mía.
N
2 comentarios:
Y poder cultivarte, como la cultura de los ancestros de Benedetti y los prolegómenos efímeros de un tal baluarte de la no justicia. Y vagar por Norru Tina de la boca, tomados de los pies, caminando con la manos...
No habrá primavera en anhedonia, pero nosotros podemos dibujar los más bellos inviernos...
G.
Muy buen poema el que nos has ofrecido, enmarcado con el "Guernica" que lo hace más tremendo.
Un beso y felicidades.
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