“Niña, adolescente, los libros me salvaron de la desesperación; eso me ha persuadido de que la cultura es el más alto de los valores, y no logro considerar esta convicción con mirada crítica.”

viernes, 5 de noviembre de 2010


Todos los caminos
parecen el mismo camino
Todas las almas
parecen la misma alma
Todas las miradas
son las mismas miradas
Al final del día,
lo único que cuenta
no es la constante
es la Revolución del Alma
cavando la tumba del hambre.
N.

2 comentarios:

Claudio Ariño dijo...

Siempre y cuando nuestra vida sea intrascendente, por eso, es importante que nuestro día sea vivido como el último.
Besos.

Xaj dijo...

Y si vamos a morir de hambre, muerde mi boca, mujer de hielo. Que màs vale asi morir, con el alma sedienta de la piel que encaja con la propia.

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