“Niña, adolescente, los libros me salvaron de la desesperación; eso me ha persuadido de que la cultura es el más alto de los valores, y no logro considerar esta convicción con mirada crítica.”

martes, 20 de octubre de 2009


Era tal la ternura de su beso,
la calidez de su piel,
el pretérito imperfecto de su espíritu
añejo como el mejor vino
y joven como el rocío matinal.
el Arte cincelando los vocablos
la parafernalia con que suspiraba,
mientras me acariciaba, yo suspendida
suspendida como calandria
arropada en la Libertad misma,
era el instante y era lo eterno
acaso lo será siempre


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