“Niña, adolescente, los libros me salvaron de la desesperación; eso me ha persuadido de que la cultura es el más alto de los valores, y no logro considerar esta convicción con mirada crítica.”

jueves, 30 de abril de 2009

Qué lindo... qué perfecto...
No hay palabras que lo describan mejor.
Qué idílico es nuestro reencuentro. Qué digno de ser retratado.
Qué armonía entre nuestras palabras. Como si lo hubieramos pensado de antemano.
No quiero que te vallas... quédate donde pueda seguirte abrazando... no te alejes mucho, permanece atado a mi cintura... No permitas que lo demás importa mientras importe lo que sentimos. No te vallas, lo repito. No te vallas, amor mío.
Te contaré un secreto: me has vuelto a enamorar.
Adivinaré tu acertijo: nunca me has dejado ir completamente.
Diremos que lo dijimos, que era obvio, hasta esperable.
Pero nunca lo sentimos como hoy, cuando al besarte...
volví a vivir.

No hay comentarios:

Buscar este blog